domingo, 25 de enero de 2009

ROMANTICISMO




Este retrato pertenece al final de mi época existencialista. Era exactamente el 21 de diciembre de 1969. Aproveché una plataforma de cemento para poner mi firma y dejarme llevar por la inspiración más romántica.

Era un momento clave de mi vida, acababa de entrar en la Universidad. Y durante dos años andaría perdido sin saber hacia dónde dirigirme.

jueves, 22 de enero de 2009

UN REPORTAJE SOBRE SUÁREZ


En 1978 viví en Ibiza, para trabajar en la edición ibicenca del "Diario de Mallorca". Fue una gran experiencia, sobre todo porque sólo éramos dos (Iñigo Morales de Rada y un servidor) y nos tocaban todo tipo de noticias. Una de la más divertidas fue el seguimiento de Suárez, que se presentó aquel agosto con Abril Martorell a bordo del yate "Ion".

El entonces presidente del Gobierno llegó en medio de aparatosas medidas de seguridad. En el aeropuerto nos hizo unas breves declaraciones: "Espero no molestar a nadie". Yo por aquel tiempo hacía gacetillas para una agencia nacional y corrí a una cabina para pasar la noticia. Entonces había unos mecanógrafos, cachazudos y siempre de mala leche, que te tomaban las crónicas. Aquel se confundió por completo y puso que Suárez había dicho que "espero que no me moleste nadie". Así se escribe la historia.

Nosotros seguíamos al yate como cuervos. Nos hicimos incluso amigos de los escoltas, que nos contaban intimidades. Como por ejemplo que todos los pasajeros incluyendo al presidente estaban llenos de magulladuras y cardenales por los golpes de mar.

En Sant Antoni, nos plantamos delante de la embarcación dispuestos a no salir hasta que Suárez nos dijera algo. Finalmente accedió, y subimos a la cubierta después de dos o tres horas de plantón. Suárez estaba muy moreno, lleno de moratones en las piernas, y fumaba mucho. Nos dijo, exigiendo "off de record", que Ibiza estaba lleno de "mujeres muy guapas" y poco más.

Unos días después conseguí arrancarle unas delcaraciones a Abril Martorell donde avanzaba que se suprimiría la obligación de tener carnet para ser periodista. Se armó un buen follón y luego él lo negó. Pero así fue.

martes, 20 de enero de 2009

INCLINACIONES



Esta fotografía la disparó mi padre en diciembre de 1952, cuando yo tenía dos años. Aquí aparecen los factores que probablemente me inclinarían a mi vocación. En primer lugar la fascinante máquina de escrbir verde que tenía mi padre en su despacho. Siempre me pareció un ingenio maravilloso, que además difícilmente podía tocar. Lo cual la hacía más deseable. Prueba de lo cual es la cara de pillo que pongo en la foto.

Y detrás, la librería. Con muchos ejemplares de la colección Austral que con sus títulos sugerentes y sus portadas de colores marcaron mi curiosidad literaria desde aquel momento.

sábado, 10 de enero de 2009

CHÂTEAU de CHILLON





Esta fotografía corresponde al invierno de 1971. Eran tiempos difíciles y agitados. Con mi amigo Miguel Morey hicimos una escapada a Suiza, que nos parecía el paradigma de la democracia y la libertad. El único problema es que no teníamos ni un duro. En una de las obligadas paradas del "auto stop" nos dejaron en el Château de Chillon, a orillas del lago Leman. Hacía mucho frío y estuvimos leyendo los prospectos y paseando.

Así nos enteramos de su relación con Lord Byron y también la proximidad con el nacimiento de la literatura fantástica. Una noche de 1816 en Villa Diorati, muy cerca de allí, cuando Mary Shelley empezó a escribir "Frankenstein" y Polidori "El Vampiro".

Regresamos a Barceona, escribimos un reportaje para el premio Brunet de periodismo. Y lo ganamos.

Fue así cómo mi vida dio un súbito giro y empecé a trabajar en prensa. Hasta hoy.

Se lo debo en el fondo a esas horas de vagabundeo por un castillo nevado. Y al fantasma de Lord Byron.